En los confines de la selva tropical, el magnífico tigre de Bengala se alza como símbolo de la historia natural y cultural de Asia. Su pelaje adornado con rayas oscuras y doradas es un testimonio de su poder y belleza, lo que representa la esencia de la ecología y su huella en la rica herencia de las civilizaciones asiáticas.

¡Guachá... guachá! Así suena la guacharaca, un ser majestuoso con plumaje marrón inconfundible. Un tesoro viviente en los abundantes paraísos tropicales de América Central y del Sur. Se deleita con cada mordisco de frutas maduras y cada sorbo de néctar de las flores.

En las frescas aguas de los ríos y lagunas colombianas emerge la icotea, una tortuga semiacuática de colores vibrantes y ojos curiosos. Su caparazón mide hasta 30 cm, las hembras suelen ser más grandes que los machos y son excelentes nadadoras.

Las tortugas del río Magdalena son verdaderos fósiles vivientes que despiertan la curiosidad y el asombro. En la fortaleza de sus caparazones, atraviesan décadas, desafiando el tiempo hasta alcanzar más de 70 años. Además de su relevancia ecológica, estas criaturas poseen un profundo significado cultural.

La nutria de río es una encantadora criatura presente en los ríos de Colombia, se destaca por su agilidad en el agua y su espíritu juguetón. Son nadadoras expertas y astutas cazadoras que se alimentan principalmente de peces y otros pequeños animales acuáticos.

El león africano pertenece a la familia de los félidos y es considerado el segundo depredador más grande del mundo después del tigre. Una de las características más distintivas es su melena, puntualmente en los machos que puede variar en color y longitud. Su alimentación se basa principalmente en la caza de grandes herbívoros, como cebras y búfalos.

Conocida popularmente como la tortuga morrocoy, es una especie fascinante de tortuga terrestre que habita en diversas regiones de América del Sur, incluyendo Colombia. Su tamaño es mediano y puede alcanzar una longitud de caparazón de 40 centímetros.